¿Con qué alimentas tu mente?
Nuestra mente es como un jardín fértil en el que florecen aquellas semillas que introduzcamos y reguemos a diario, ya que funciona en términos de imágenes y de palabras, dos medios excelentes de sembrar pensamiento positivo son la visualización y las afirmaciones.
Cuando visualizamos imágenes positivas de una manera regular, imágenes positivas de nosotros, de los demás y de la vida en general, éstas van arraigando en la tierra fértil de nuestra mente que luego las producirá por sí misma.
Igual ocurre con las afirmaciones. Cuando de manera consciente y deliberada realizamos afirmaciones como: la vida es una experiencia maravillosa, el mundo está lleno de buenas personas o tengo un enorme potencial que puedo desarrollar, se producen dos efectos. El primero es que esa pasa a ser nuestra realidad interna, que a la postre tendrá su reflejo en nuestra realidad externa. El segundo es que al realizar reiteradamente esta clase de afirmaciones positivas, este tipo de pensamiento se va instalando en nuestra mente y luego se generará de manera automática.
Las películas inspiradoras y que muestran lo mejor de la vida y de los seres humanos, así como la lectura de libros y biografías que también muestren esto, son otra excelente fuente para sembrar semillas de pensamiento positivo.
En definitiva, se trata de tomar el mando de lo que entra en nuestra mente y nutrirla con alimento de calidad, en lugar de ser un sujeto pasivo al albur de todo el material mental que el mundo produce, y que en el caso del generado por los medios de comunicación tiene un componente negativo ciertamente importante.