
Se salvó estudiante mordido por serpiente en colegio de Villavicencio
Villavicencio. Fuera de peligro, pero en observación médica se encuentra un estudiante del Colegio Catumare campestre que fue víctima de la mordedura de una serpiente en un salón del establecimiento educativo.
El estudiante Andrés Estaban Marín, que fue remitido de urgencia a la clínica Servimédicos, fue valorado por los médicos y sometido a exámenes de toxicología, para determinar el tipo de veneno que pudo haber recibido su cuerpo producto del accidente ofídico.
Finalmente, el diagnóstico de los galenos reveló que la mordedura fue causada por una especie no venenosa, y que en las próximas horas seria dado de alta, explicó la abuela del menor, Sandra Fierro.
Los padres de familia del colegio Catumare, solicitaron a las directivas de la institución y a las secretarias de salud y medio ambiente, como a Cormacarena, adelantar una visita de inspección al plantel, para verificar si no hay presencia de otros ofidios en las instalaciones del centro educativo, que puedan poner en riesgo a los estudiantes.
Consultado por Noticias YA un experto en el tema de las serpientes aseguró que en el departamento del Meta hay una gran variedad de especies de ofidios y que sólo un 20% de las que se encuentran en nuestro entorno son venenosas y representan algún peligro para el ser humano.
La mayoría de las especies no generan amenaza clínica, y cuando se presenta una mordedura o ataque, después de estabilizar al paciente hay que verificar con pruebas de laboratorio el tipo de veneno que pudo dejar en el paciente, para determinar la especie y su peligrosidad.
Entre las especies de serpientes están la familia viperidae, que son las víboras como la cuatronarices, cascabel, mapaná, que poseen veneno hemotóxico, y la familia de las Elapidae o género murucus, que son las conocidas corales, las más peligrosas y que tienen veneno neuro tóxico, que paralizan en pocos minutos el cuerpo de la víctima.
Y las restantes, según el veterinario Javier Muñoz, son las llamadas colubridas y los boídos, que no poseen veneno, como las cazadoras, la falsa mapaná, la tigra, los güios, la falsa coral y las jugueteadoras.